miércoles, 30 de junio de 2010

1000 reasons.


-Ya lo debería haber mandado a la mierda.
_¿Por qué?
-Por engañarme. Por mentirme a mí y mentirse a sí mismo, por romper lo que había. Por desaparecer durante meses y volver cuando menos le espero, cuando no estoy preparada. Por hacer promesas sólo para romperlas en cuestión de días. Por darme esperanza y fallarme tantas veces. Por hacerme llegar a límites inhumanos, por desaprovechar todas las segundas, terceras, y cuartas oportunidades que le doy. Porque aunque querría confiar en él, no me deja hacerlo. Por desilusionarme tanto, por hacerme perder la fe en todo. Por hacer que esto sea tan sumamente difícil. Por hacer que le quiera. Por cada abrazo que me da y luego se esfuma en el tiempo. Por cada sonrisa que se esfuerza por sacarme, y cada una que él me dedica. Por las veces que sé que son solo para mí. Por ser así de impreciso, confuso.
_Pero, ¿y aun así...?
-Sí. Aun así, le quiero.
_¿A pesar de todo eso? ¿A pesar de haberte fallado siempre? No lo entiendo. Tú misma dices que por menos, olvidarías a cualquier otro.
-Ése es el problema. No es cualquier otro. Es él. Sin él estaría vacía, no habría luz. No puedo evitar perdonarle cualquier cosa, mil veces si hace falta. Es esencial. Quizás le quiera precisamente por todo eso.





You are everything I need and more.

martes, 29 de junio de 2010

My world.

¿No sientes lo que yo he sentido cada día que estuvimos separados durante los últimos tres años? Porque yo lo he sentido. Hay una parte vital de mí que se había perdido. Y traté de llenarla. Traté de llenarla con trabajo, amigos y música y seguí vacía hasta anoche cuando me besaste y mi universo entero encajó de nuevo en su eje.

sábado, 19 de junio de 2010

What's wrong?

-¿Te pasa algo?
_No.
-No es verdad.
_No...



¿Quieres de verdad saber cuál es el problema? Que no me quieres. Y yo tengo demasiado miedo. No sé, creo que ya lo he pasado bastante mal, no querría volver a caer. Vuelve la frase de siempre. "No es por ti. Es por mí." Y te juro que es verdad. Pero estoy cansada de entregarme a la gente, porque ese camino tiene una sola salida: el dolor.